Reírse no sólo beneficia nuestras emociones sino que modifica nuestro cerebro de forma positiva y fortalece el cuerpo. Así lo explica para Agencia EFE la Doctora Natalia López Moratalla.
Podría decirse entonces que si nos esforzamos por tener pensamientos positivos ante los contratiempos y dificultades, nuestro cerebro memorizará esas conexiones positivas, haciendo que con el tiempo, y sin esforzarnos tanto, tendamos un poco más al optimismo y no veamos las cosas tan mal. De igual modo, merece la pena esforzarse por ser conscientes de todo lo bueno que tenemos a nuestro alrededor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario